1. Inicio
  2. Home
  3. Blog
  4. Enfermedades autoinmunes
  5. Volviendo a lo básico... Cómo el zinc de bajo costo ayuda a combatir la inmunosenescencia mortal

Volviendo a lo básico... Cómo el zinc de bajo costo ayuda a combatir la inmunosenescencia mortal

11977 Views Posted on: 2016-05-22
Posted by: Ireneusz Adamczyk
How Low-Cost Zinc Helps Combat Deadly ImmunosenescenceEl cuerpo requiere zinc para más de 2000 factores de transcripción involucrados en la expresión génica de varias proteínas.1 Lo que esto significa en el lenguaje cotidiano es que miles de funciones biológicas esenciales dependen del zinc.

La comunidad médica ha sabido de la deficiencia de zinc durante más de 50 años, pero las organizaciones mundiales de salud han ignorado en gran medida el impacto en la salud de este mineral crucial. Una amplia investigación científica ha dejado en claro que la deficiencia nutricional de zinc es muy frecuente y sus morbilidades son graves.1

Abrumadoramente, los ancianos tienen deficiencia de zinc1. Debido a que el zinc gobierna tantas funciones biológicas, una simple deficiencia de zinc puede afectar múltiples facetas de la salud y el desarrollo.1 El resultado es una disminución en el sistema inmunológico vigilante de nuestro cuerpo, lo que abre la puerta a una avalancha de numerosas enfermedades. Una deficiencia de zinc contribuye a la aterosclerosis, el cáncer, los trastornos neurológicos, las enfermedades autoinmunes y otras afecciones crónicas relacionadas con la edad.2

Un objetivo en el que se están enfocando los investigadores es el hecho de que una deficiencia de zinc puede hacer que su sistema inmunológico disminuya, un fenómeno conocido como inmunosenescencia. Esta disminución de la inmunidad coloca a los adultos mayores en un mayor riesgo de contraer una variedad de casi todas las enfermedades graves, desde infecciones y cáncer.3 Afortunadamente, la suplementación con la cantidad adecuada de zinc puede brindar beneficios vitales contra las enfermedades del envejecimiento. Los estudios han demostrado que la suplementación con zinc en los ancianos puede restaurar la función normal de las células asesinas que atacan a las células cancerosas y infectadas por virus, así como estimular los mecanismos antienvejecimiento del sistema inmunitario.4-6

Se ha descubierto que los niveles adecuados de zinc reducen el riesgo de infección y también disminuyen los marcadores oxidativos e inflamatorios.7

Incluso si los niveles de zinc son adecuados, la suplementación con zinc puede ofrecer una protección adicional contra el cáncer. En animales con niveles normales de zinc, la cantidad de tumores inducidos experimentalmente fue un 28 % menor cuando los animales recibieron un suplemento modesto de zinc.8

No hay razón para que este mineral económico y fácilmente disponible no sea un componente esencial de su programa de salud personal contra los peligros de la inmunosenescencia.

Inmunosenescencia: la disminución del sistema inmunológico

La deficiencia de zinc es rampante entre los adultos mayores. Al igual que con tantos otros elementos esenciales, los niveles de zinc disminuyen con la edad.9 Pero eso es solo una parte del problema.

Otra causa importante es que las personas simplemente no obtienen suficiente cantidad de este nutriente a diario. La cantidad diaria mínima recomendada (RDA) de zinc por parte del gobierno es de solo 15 mg. Sin embargo, entre el 35 % y el 45 % de las personas mayores de 60 años ni siquiera reciben la mitad de eso.10-13

Los científicos ahora creen que la deficiencia de zinc juega un papel directo en el envejecimiento del sistema inmunológico, conocido como inmunosenescencia.14

En la inmunosenescencia, hay una disminución en las células del sistema inmunitario que normalmente identifican y destruyen células anormales (como bacterias, células infectadas por virus y células cancerosas).15 Eso deja a los adultos mayores cada vez más vulnerables a infecciones y cánceres, al tiempo que hace que las vacunas sean menos efectivas. también.16

La inmunosenescencia también aumenta la frecuencia y la gravedad de los trastornos autoinmunitarios (como la artritis reumatoide y el lupus), en los que el sistema inmunitario ataca y destruye el tejido corporal sano.16 Además, la inmunosenescencia conduce a la pérdida del control regulatorio, lo que se suma a la carga total de inflamación en el cuerpo, lo que lleva a la aterosclerosis, la osteoporosis y aumenta aún más los riesgos de cáncer.14,17

Combate la inmunosenescencia con zinc

Battle Immunosenescence With ZincLa inmunosenescencia es un proceso muy complejo que los investigadores aún están entendiendo. Sin embargo, ahora los científicos se están dando cuenta de que el sistema inmunitario de los ancianos es el resultado de un proceso de remodelación continuo.18 Eso significa que es posible luchar contra este fenómeno del envejecimiento, para el cual el zinc es un componente vital. Existen notables similitudes entre la inmunosenescencia y la deficiencia de zinc, similitudes tan sorprendentes que los científicos ahora creen que no pueden ser coincidencias.19,20

Una deficiencia de zinc reduce la actividad de la glándula timo, lo que impide la producción de células T "asesinas" esenciales. Esto cambia el equilibrio hacia las células "supresoras" que reducen la respuesta inmunitaria.21

Los niveles bajos de zinc también aumentan la aparición de autoinmunidad e inflamación excesiva (como se observa en la inmunosenescencia).20 Incluso los niveles bajos de zinc en el límite pueden afectar el funcionamiento inmunológico y disminuir la respuesta a las vacunas.19,21 Si bien es poco probable que el zinc inadecuado sea el única causa de inmunosenescencia, parece ser uno de los principales contribuyentes.

Lo que esto significa para usted es que al restaurar los niveles de zinc a los que se encuentran en las personas más jóvenes, podemos retardar la inmunosenescencia y protegernos contra el cáncer, las infecciones, la autoinmunidad y la inflamación crónica.21

Se ha demostrado que la suplementación con zinc en los ancianos confiere los siguientes beneficios:

  • Restaurar la función normal de las células asesinas que persiguen a las células cancerosas y infectadas por virus.4,5
  • Impulsar la respuesta al estrés de los glóbulos blancos de los adultos mayores, brindando un mecanismo antienvejecimiento al sistema inmunitario.6
  • Estimular la respuesta inmunitaria a las vacunas, que son cada vez más vitales para proteger a los adultos mayores de infecciones peligrosas.5,22
  • Mejore la inmunidad celular y aumente las tasas de supervivencia en ratones más viejos.19,23

La suplementación con zinc es tan ampliamente reconocida como esencial para el apoyo saludable del sistema inmunológico que ahora figura ampliamente en los programas de salud internacionales destinados a reducir el número de muertes por enfermedades como la diarrea severa, la malaria y la tuberculosis.24-27

Lo que necesita saber: Proteja la salud inmunológica con zinc

Guard Immune Health With Zinc
  • La inmunosenescencia, el envejecimiento del sistema inmunitario, es uno de los principales contribuyentes a las tasas más altas de infecciones y cánceres graves que se observan en los adultos mayores.
  • Un contribuyente importante a la inmunosenescencia es la caída de los niveles de zinc, que ocurre en una gran proporción de personas a medida que envejecen.
  • La deficiencia de zinc, por lo tanto, está estrechamente relacionada con el riesgo de infección y cáncer, y también se observa en personas obesas y diabéticas.
  • Se ha demostrado que la suplementación con zinc mejora el rendimiento del sistema inmunitario envejecido, lo que reduce los riesgos de infecciones, cánceres y obesidad/diabetes.
  • El zinc merece un lugar destacado en su régimen de suplementos por todas estas razones.

El zinc combate las infecciones

Las infecciones, especialmente las del sistema respiratorio, son una grave amenaza para la salud de los adultos mayores de 60 años. Complementar con zinc puede ayudar a reducir el riesgo de estas peligrosas infecciones en los adultos mayores.

Un estudio mostró que una dosis diaria de 45 mg de zinc redujo la incidencia de todas las infecciones, incluidas las de las vías respiratorias, en adultos mayores.7 Y a una dosis muy alta (80 mg/día), se descubrió que el zinc reduce las muertes en general en un 27 % durante una mediana de 6,5 años.28 (Tenga en cuenta: el zinc no debe consumirse en dosis superiores a 90 a 100 mg/día; en esas dosis puede tener un efecto negativo sobre la inmunidad y puede producir síntomas en las vías urinarias.3 ,29)

Dos amenazas específicas para las cuales el zinc ha demostrado su eficacia incluyen la neumonía y la influenza.

La neumonía es una de las principales causas de muerte en los adultos mayores en los EE. UU. 28. La neumonía prevalece en este grupo de edad precisamente debido a la inmunosenescencia, la disminución de la protección contra las infecciones. Pero recuerde, la inmunosensibilidad puede ser un resultado directo de la deficiencia de zinc. Eso ayuda a explicar por qué las personas con niveles bajos de zinc tienen incluso más probabilidades de contraer neumonía y de tener una infección más grave, tienen más probabilidades de necesitar más antibióticos durante más tiempo y tienen más probabilidades de morir de neumonía que las personas con niveles saludables de zinc .29

Afortunadamente, los estudios muestran que simplemente restaurar el zinc a niveles normales ayuda a combatir la neumonía, reduciendo su incidencia hasta en un 41 %, reduciendo las recetas de nuevos antibióticos casi a la mitad y acortando la duración de la enfermedad.30 En un estudio de dos años de enfermería residentes en el hogar, la suplementación diaria con 20 mg de zinc y 100 microgramos de selenio disminuyó el número promedio de infecciones respiratorias en comparación con los pacientes que tomaron un placebo.31

Otro estudio más grande mostró que las mismas dosis de zinc y selenio mejoraron la producción de anticuerpos en personas mayores después de una vacunación contra los gérmenes que causan neumonía.32

También se ha descubierto que el zinc es beneficioso contra la influenza, otra infección que puede ser especialmente peligrosa para los adultos mayores. La infección del tejido pulmonar por el virus de la influenza produce una rápida destrucción de las células a través de la inflamación y la apoptosis.33 El zinc tiene la capacidad de combatir directamente estos efectos negativos de la influenza.

Los estudios de laboratorio muestran que la suplementación con zinc de las células en cultivo bloquea la respuesta inflamatoria, cierra el ciclo autodestructivo de la apoptosis y reduce la liberación de nuevos virus de las células fragmentadas.33,34

Los estudios en humanos confirman estos resultados. Lo que es más importante desde el punto de vista de la prevención, la suplementación con zinc mejora notablemente la respuesta a las vacunas contra la influenza entre los adultos mayores.23,32,35 Se produjo un aumento en los anticuerpos contra la influenza en el 87 % de las personas suplementadas y solo en el 41 % de los controles. En respuesta a la vacuna, los sujetos suplementados lograron una proliferación de glóbulos blancos diez veces mayor que la del grupo de control.35

Additional Benefits Of Zinc

Beneficios adicionales del zinc

El zinc tiene un impacto en una amplia variedad de enfermedades. Hoy podemos decir con confianza que el zinc juega un papel importante en las enfermedades cardiovasculares (donde mejora los perfiles lipídicos),60-66 en los trastornos neurológicos y cognitivos (donde puede mejorar el rendimiento mental y disminuir el riesgo de depresión),9,67- 77 y en la prevención de la degeneración macular relacionada con la edad, una de las principales causas de ceguera en los ancianos.78-83

Apoye el sistema de vigilancia contra el cáncer de su cuerpo

Ya sea que se dé cuenta o no, cada uno de nosotros experimenta docenas de cambios celulares precancerosos diariamente. La razón por la que no todos desarrollamos tumores malignos todos los días es gracias a la agresiva vigilancia contra el cáncer por parte del sistema inmunitario del cuerpo, en particular las agresivas células "asesinas naturales" que buscan y destruyen las células anormales.36

El zinc es absolutamente esencial para que este sistema de vigilancia contra el cáncer funcione correctamente. Es por eso que, cuando los niveles de zinc bajan, vemos una tasa sustancialmente más alta de cáncer, especialmente en la boca, el esófago y el estómago.37 Los tejidos de su tracto digestivo son particularmente vulnerables porque están más expuestos a las toxinas externas que ingerimos. 

Restaurar los niveles de zinc de su cuerpo previene la pérdida de la función de las células asesinas naturales, reduce la inflamación que promueve el cáncer y reduce la capacidad de las células cancerosas para desarrollar nuevos vasos sanguíneos.36,38-40 Como resultado, la suplementación con zinc se ha asociado con una reducción incidencia y/o progresión de cáncer de lengua, esófago, estómago y colon en animales con deficiencias de zinc.8,37,41-45

El zinc ofrece protección adicional contra el cáncer al privar a los tumores de la glucosa que necesitan para crecer y propagarse. Las células cancerosas absorben glucosa a un ritmo muy alto en comparación con los tejidos no malignos; presumiblemente, eso se debe a que los tumores de rápido crecimiento tienen requisitos de energía excepcionalmente altos.46 Los suplementos de zinc parecen reducir la absorción de glucosa en las células malignas, lo que reduce la disponibilidad de energía que las células cancerosas necesitan para replicarse y progresar.46

El zinc también es importante en los cánceres fuera del tracto digestivo. El riesgo de linfoma no Hodgkin, un cáncer común de la sangre, es un 42 % más bajo en personas con niveles más altos de zinc en comparación con aquellas con niveles más bajos.47 Y entre los pacientes con cánceres de cabeza y cuello, se encontró que casi el 65 % tenían deficiencia de zinc .39

El cáncer de próstata también es sensible al zinc. Normalmente, la próstata contiene diez veces la cantidad de zinc que se encuentra en otros tejidos blandos, pero la acumulación de zinc en el tejido prostático disminuye poco después de que comienza el cáncer de próstata.48 La suplementación restablece los niveles normales de zinc en la próstata y reduce los niveles de un promotor del crecimiento tumoral (IGF-1). 48 La suplementación también apoya las enzimas antioxidantes naturales en la próstata; esas enzimas se deterioran como resultado del alto estrés oxidativo impuesto por el crecimiento de tumores malignos.49

Incluso si sus niveles de zinc son adecuados, la suplementación con zinc podría ofrecer una protección adicional contra el cáncer. En animales con niveles normales de zinc, la cantidad de tumores inducidos experimentalmente fue un 28 % menor cuando los animales recibieron un suplemento modesto de zinc.8

Fuentes dietéticas de zinc10
Comida Mg de zinc por porción
Ostras 74,0
Asado de ternera 7,0
Langosta 3,4
Lomo de cerdo 2,9
Frijoles al horno 2,9
Pollo 2,4
Yogur 1,7
Anacardos 1,6
Dietary Sources Of Zinc
  • La dosis diaria recomendada mínima de zinc es de 15 mg según el gobierno. Las dosis complementarias óptimas para los seres humanos que envejecen pueden ser cinco veces más altas, hasta 80 mg al día.86
  • Aunque es posible obtener zinc de fuentes vegetales, su cuerpo no puede utilizarlo tan bien porque las moléculas que se encuentran en los panes, los cereales y las legumbres pueden unir el zinc y evitar que su cuerpo lo absorba.10

Diabetes y Obesidad

La ciencia que demuestra la importancia del zinc en la prevención de la diabetes y sus consecuencias es tan fuerte que el zinc se ha vuelto ampliamente aceptado como un suplemento importante para las personas en riesgo de padecer diabetes, e incluso para quienes ya la padecen.

Además, el zinc participa en la síntesis, almacenamiento y liberación de insulina. La deficiencia de zinc se asocia con resistencia a la insulina, intolerancia a la glucosa y obesidad. En un estudio de personas obesas suplementadas con 30 mg de zinc durante un mes, los investigadores encontraron reducciones significativas en el peso corporal, el índice de masa corporal (IMC) y los triglicéridos.50

Los estudios muestran que la suplementación con zinc reduce los niveles de glucosa tanto en ayunas como después de las comidas y reduce la medida a largo plazo de la glucosa en sangre llamada hemoglobina A1c.51-55 La suplementación con zinc también mejora la sensibilidad a la insulina y reduce los niveles de insulina, un factor importante en las personas con “ prediabetes” (glucosa alterada en ayunas).56-58

Los niveles más altos de zinc en la sangre están asociados con lo siguiente:

  • Disminución del 10 al 15% en el riesgo de diabetes.
  • 34 a 43% menor riesgo de intolerancia a la glucosa.
  • Reducción del 12 al 13% en la obesidad central.
  • Reducción del 23 al 43% en la enfermedad de las arterias coronarias.59

En otro estudio, el peso corporal y el índice de masa corporal disminuyeron luego de la suplementación con 20 mg de zinc.58 Esto es particularmente importante debido a la relación entre la obesidad, los niveles altos de insulina y el cáncer. La suplementación con zinc también mejora notablemente la velocidad de conducción nerviosa, una medida del daño nervioso diabético.52

Zinc y cobre: un acto de equilibrio

Zinc and Copper: A Balancing Act
La investigación ha demostrado que una dosis más alta de suplementos de zinc ha producido un beneficio significativo.86 Sin embargo, la suplementación a largo plazo de zinc en dosis superiores a los 50 mg puede interferir con la biodisponibilidad del cobre y dar como resultado una deficiencia de cobre.87 El alto consumo de zinc induce la síntesis intestinal. de una proteína que se une al cobre llamada metalotioneína.87 La metalotioneína atrapa el cobre dentro de las células intestinales y evita su absorción sistémica. La deficiencia de cobre puede provocar manifestaciones clínicas como anemia, niveles bajos de neutrófilos (el tipo de glóbulo blanco más abundante) y anomalías óseas, incluidas fracturas.88
Los niveles bajos de cobre también pueden conducir a una mayor concentración de colesterol total y colesterol LDL, reducción del colesterol HDL, disminución de la tolerancia a la glucosa y alteración del ritmo cardíaco.88 Las personas que se suplementan con más de 50 mg de zinc de forma crónica deben considerar la suplementación con 2 mg de cobre al día para abordar el riesgo de deficiencia de cobre asociado con la ingestión alta de zinc. Es poco probable que la suplementación a corto plazo de altas dosis de zinc afecte la distribución de cobre en el cuerpo.87

Resumen

La inmunosenescencia, el envejecimiento del sistema inmunitario, es uno de los principales contribuyentes a las tasas más altas de infecciones y cánceres graves que se observan en los adultos mayores. Aunque anteriormente se pensaba que la inmunosenescencia era un efecto natural del envejecimiento, ahora los científicos creen que podría deberse en parte a una deficiencia de zinc.

Eso significa que algo tan simple como complementar con zinc podría retrasar o revertir la inmunosenescencia. Los estudios muestran que la suplementación con zinc reduce el riesgo de infecciones graves como la neumonía y la influenza. Los estudios de laboratorio también demuestran un notable efecto preventivo del cáncer del suplemento de zinc. Incluso los flagelos gemelos de la obesidad y la diabetes muestran signos de ceder a la terapia con zinc, con medidas mejoradas de glucosa en sangre y masa corporal reducida, así como menos complicaciones diabéticas, como daño a los nervios y los riñones.

Si no está tomando un suplemento de zinc hoy, debe considerarlo para minimizar el impacto de la inmunosenescencia en su cuerpo.

TABLA: El zinc y su salud10

Preocupación por la salud Impacto de la insuficiencia de zinc
Función Inmune Mayor susceptibilidad a la neumonía y otras infecciones28
Curación de heridas Cicatriz de heridas lenta o incompleta84
Salud Gastrointestinal Empeoramiento de las enfermedades inflamatorias del intestino y aumento de la producción de citoquinas inflamatorias85
Visión Mayor riesgo de degeneración macular relacionada con la edad (AMD)78-83
Salud cardiovascular Aumento de lípidos plasmáticos, marcadores de aterosclerosis62
Cáncer Disminución de la vigilancia inmunológica contra las células cancerosas39
Diabetes Disminución del control del azúcar en la sangre55
Salud neurológica y mental Mayor riesgo de depresión; disminución del rendimiento cognitivo9,77

Material utilizado con permiso de Life Extension. Todos los derechos reservados.

  1. Prasad AS. Zinc deficiency. BMJ. 2003 March 22;326(7386):409–10.
  2. Chasapis CT, Loutsidou AC, Spiliopoulou CA, Stefanidou ME. Zinc and human health: an update. Arch Toxicol. 2012 Apr;86(4):521-34.
  3. Pae M, Meydani SN, Wu D. The role of nutrition in enhancing immunity in aging. Aging Dis. 2012 Feb;3(1):91-129.
  4. Kahmann L, Uciechowski P, Warmuth S, Malavolta M, Mocchegiani E, Rink L. Effect of improved zinc status on T helper cell activation and TH1/TH2 ratio in healthy elderly individuals. Biogerontology. 2006 Oct-Dec;7(5-6):429-35.
  5. Duchateau J, Delepesse G, Vrijens R, Collet H. Beneficial effects of oral zinc supplementation on the immune response of old people. Am J Med. 1981 May;70(5):1001-4.
  6. Putics A, Vodros D, Malavolta M, Mocchegiani E, Csermely P, Soti C. Zinc supplementation boosts the stress response in the elderly: Hsp70 status is linked to zinc availability in peripheral lymphocytes. Exp Gerontol. 2008 May;43(5):452-61.
  7. Prasad AS, Beck FW, Bao B, et al. Zinc supplementation decreases incidence of infections in the elderly: effect of zinc on generation of cytokines and oxidative stress. Am J Clin Nutr. 2007 Mar;85(3):837-44.
  8. Sun J, Liu J, Pan X, et al. Effect of zinc supplementation on N-nitrosomethylbenzylamine-induced forestomach tumor development and progression in tumor suppressor-deficient mouse strains. Carcinogenesis. 2011 Mar;32(3):351-8.
  9. Marcellini F, Giuli C, Papa R, et al. Zinc in elderly people: effects of zinc supplementation on psychological dimensions in dependence of IL-6 -174 polymorphism: a Zincage study. Rejuvenation Res. 2008 Apr;11(2):479-83.
  10. Available at: http://ods.od.nih.gov/factsheets/Zinc-HealthProfessional/. Accessed December 12, 2013
  11. Ervin RB, Kennedy-Stephenson J. Mineral intakes of elderly adult supplement and non-supplement users in the third national health and nutrition examination survey. J Nutr. 2002 Nov;132(11):3422-7.
  12. Mocchegiani E, Romeo J, Malavolta M, et al. Zinc: dietary intake and impact of supplementation on immune function in elderly. Age (Dordr). 2012 Jan 6.
  13. Prasad AS, Fitzgerald JT, Hess JW, Kaplan J, Pelen F, Dardenne M. Zinc deficiency in elderly patients. Nutrition. 1993 May-Jun;9(3):218-24.
  14. Mocchegiani E, Malavolta M, Marcellini F, Pawelec G. Zinc, oxidative stress, genetic background and immunosenescence: implications for healthy ageing. Immun Ageing. 2006;3:6.
  15. Varin A, Larbi A, Dedoussis GV, et al. In vitro and in vivo effects of zinc on cytokine signalling in human T cells. Exp Gerontol. 2008 May;43(5):472-82.
  16. Sidler C, Wóycicki R, Ilnytskyy Y, Metz G, Kovalchuk I, Kovalchuk O. Immunosenescence is associated with altered gene expression and epigenetic regulation in primary and secondary immune organs. Front Genet. 2013 Oct 18;4:211.
  17. Mazzatti DJ, Malavolta M, White AJ, et al. Effects of interleukin-6 -174C/G and metallothionein 1A +647A/C single-nucleotide polymorphisms on zinc-regulated gene expression in ageing. Exp Gerontol. 2008 May;43(5):423-32.
  18. Ongrádi J, Kövesdi V. Factors that may impact on immunosenescence: an appraisal. Immun Ageing. 2010 Jun 14;7:7.
  19. Wong CP, Song Y, Elias VD, Magnusson KR, Ho E. Zinc supplementation increases zinc status and thymopoiesis in aged mice. J Nutr. 2009 Jul;139(7):1393-7.
  20. Haase H, Rink L. The immune system and the impact of zinc during aging. Immun Ageing. 2009;6:9.
  21. Haase H, Mocchegiani E, Rink L. Correlation between zinc status and immune function in the elderly. Biogerontology. 2006 Oct-Dec;7(5-6):421-8.
  22. Ahmed T, Arifuzzaman M, Lebens M, Qadri F, Lundgren A. CD4+ T-cell responses to an oral inactivated cholera vaccine in young children in a cholera endemic country and the enhancing effect of zinc supplementation. Vaccine. 2009 Dec 11;28(2):422-9.
  23. Mocchegiani E, Malavolta M, Muti E, et al. Zinc, metallothioneins and longevity: interrelationships with niacin and selenium. Curr Pharm Des. 2008;14(26):2719-32.
  24. Rao VB, Pelly TF, Gilman RH, et al. Zinc cream and reliability of tuberculosis skin testing. Emerg Infect Dis. 2007 Jul;13(7):1101-4.
  25. Raqib R, Roy SK, Rahman MJ, et al. Effect of zinc supplementation on immune and inflammatory responses in pediatric patients with shigellosis. Am J Clin Nutr. 2004 Mar;79(3):444-50.
  26. Rahman MJ, Sarker P, Roy SK, et al. Effects of zinc supplementation as adjunct therapy on the systemic immune responses in shigellosis. Am J Clin Nutr. 2005 Feb;81(2):495-502.
  27. Zeba AN, Sorgho H, Rouamba N, et al. Major reduction of malaria morbidity with combined vitamin A and zinc supplementation in young children in Burkina Faso: a randomized double blind trial. Nutr J. 2008;7:7.
  28. Barnett JB, Hamer DH, Meydani SN. Low zinc status: a new risk factor for pneumonia in the elderly? Nutr Rev. 2010 Jan;68(1):30-7.
  29. Johnson AR, Munoz A, Gottlieb JL, Jarrard DF. High dose zinc increases hospital admissions due to genitourinary complications. J Urol. 2007 Feb;177(2):639-43.
  30. Fischer Walker C, Black RE. Zinc and the risk for infectious disease. Annu Rev Nutr. 2004;24:255-75.
  31. Girodon F, Lombard M, Galan P, et al. Effect of micronutrient supplementation on infection in institutionalized elderly subjects: a controlled trial. Ann Nutr Metab. 1997;41(2):98-107.
  32. Girodon F, Galan P, Monget AL, et al. Impact of trace elements and vitamin supplementation on immunity and infections in institutionalized elderly patients: a randomized controlled trial. MIN. VIT. AOX. geriatric network. Arch Intern Med. 1999 Apr 12;159(7):748-54.
  33. Onose A, Hashimoto S, Hayashi S, et al. An inhibitory effect of A20 on NF-kappaB activation in airway epithelium upon influenza virus infection. Eur J Pharmacol. 2006 Jul 17;541(3):198-204.
  34. Srivastava V, Rawall S, Vijayan VK, Khanna M. Influenza a virus induced apoptosis: inhibition of DNA laddering andamp; caspase-3 activity by zinc supplementation in cultured HeLa cells. Indian J Med Res. 2009 May;129(5):579-86.
  35. Langkamp-Henken B, Bender BS, Gardner EM, et al. Nutritional formula enhanced immune function and reduced days of symptoms of upper respiratory tract infection in seniors. J Am Geriatr Soc. 2004 Jan;52(1):3-12.
  36. Chowdhury BA, Chandra RK. Effect of zinc administration on cadmium-induced suppression of natural killer cell activity in mice. Immunol Lett. 1989 Oct;22(4):287-91.
  37. Fong LY, Jiang Y, Riley M, et al. Prevention of upper aerodigestive tract cancer in zinc-deficient rodents: inefficacy of genetic or pharmacological disruption of COX-2. Int J Cancer. 2008 Mar 1;122(5):978-89.
  38. Ibs KH, Rink L. Zinc-altered immune function. J Nutr. 2003 May;133(5 Suppl 1):1452S-6S.
  39. Prasad AS. Zinc in human health: effect of zinc on immune cells. Mol Med. 2008 May-Jun;14(5-6):353-7.
  40. Prasad AS, Beck FW, Snell DC, Kucuk O. Zinc in cancer prevention. Nutr Cancer. 2009;61(6):879-87.
  41. Dani V, Goel A, Vaiphei K, Dhawan DK. Chemopreventive potential of zinc in experimentally induced colon carcinogenesis. Toxicol Lett. 2007 Jun 15;171(1-2):10-8.
  42. Malhotra A, Chadha VD, Nair P, Dhawan DK. Role of zinc in modulating histo-architectural and biochemical alterations during dimethylhydrazine (DMH)-induced rat colon carcinogenesis. J Environ Pathol Toxicol Oncol. 2009;28(4):351-9.
  43. Chadha VD, Dhawan DK. Ultrastructural changes in rat colon following 1,2-dimethylhydrazine-induced colon carcinogenesis: protection by zinc. Oncol Res. 2010;19(1):1-11.
  44. Chadha VD, Garg ML, Dhawan D. Influence of extraneous supplementation of zinc on trace elemental profile leading to prevention of dimethylhydrazine-induced colon carcinogenesis. Toxicol Mech Methods. 2010 Oct;20(8):493-7.
  45. Fong LY, Jiang Y, Rawahneh ML, et al. Zinc supplementation suppresses 4-nitroquinoline 1-oxide-induced rat oral carcinogenesis. Carcinogenesis. 2011 Apr;32(4):554-60.
  46. Chadha VD, Dhawan DK. In vitro (1)(4)C-labeled amino acid uptake changes and surface abnormalities in the colon after 1,2-dimethylhydrazine-induced experimental carcinogenesis: protection by zinc. J Environ Pathol Toxicol Oncol. 2011;30(2):103-11.
  47. Kelemen LE, Cerhan JR, Lim U, et al. Vegetables, fruit, and antioxidant-related nutrients and risk of non-Hodgkin lymphoma: a National Cancer Institute-Surveillance, Epidemiology, and End Results population-based case-control study. Am J Clin Nutr. 2006 Jun;83(6):1401-10.
  48. Prasad AS, Mukhtar H, Beck FW, et al. Dietary zinc and prostate cancer in the TRAMP mouse model. J Med Food. 2010 Feb;13(1):70-6.
  49. Banudevi S, Elumalai P, Sharmila G, Arunkumar R, Senthilkumar K, Arunakaran J. Protective effect of zinc on N-methyl-N-nitrosourea and testosterone-induced prostatic intraepithelial neoplasia in the dorsolateral prostate of Sprague Dawley rats. Exp Biol Med (Maywood). 2011 Sep 1;236(9):1012-21.
  50. Payahoo L, Ostadrahimi A, Mobasseri M, et al. Effects of zinc supplementation on the anthropometric measurements, lipid profiles and fasting blood glucose in the healthy obese adults. Adv Pharm Bull. 2013;3(1):161-5.
  51. Al-Maroof RA, Al-Sharbatti SS. Serum zinc levels in diabetic patients and effect of zinc supplementation on glycemic control of type 2 diabetics. Saudi Med J. 2006 Mar;27(3):344-50.
  52. Gupta R, Garg VK, Mathur DK, Goyal RK. Oral zinc therapy in diabetic neuropathy. J Assoc Physicians India. 1998 Nov;46(11):939-42.
  53. Gunasekara P, Hettiarachchi M, Liyanage C, Lekamwasam S. Effects of zinc and multimineral vitamin supplementation on glycemic and lipid control in adult diabetes. Diabetes Metab Syndr Obes. 2011;4:53-60.
  54. Capdor J, Foster M, Petocz P, Samman S. Zinc and glycemic control: A meta-analysis of randomised placebo controlled supplementation trials in humans. J Trace Elem Med Biol. 2012 Nov 5.
  55. Jayawardena R, Ranasinghe P, Galappatthy P, Malkanthi R, Constantine G, Katulanda P. Effects of zinc supplementation on diabetes mellitus: a systematic review and meta-analysis. Diabetol Metab Syndr. 2012;4(1):13.
  56. Marreiro DN, Geloneze B, Tambascia MA, Lerario AC, Halpern A, Cozzolino SM. Effect of zinc supplementation on serum leptin levels and insulin resistance of obese women. Biol Trace Elem Res. 2006 Aug;112(2):109-18.
  57. Hashemipour M, Kelishadi R, Shapouri J, et al. Effect of zinc supplementation on insulin resistance and components of the metabolic syndrome in prepubertal obese children. Hormones (Athens). 2009 Oct-Dec;8(4):279-85.
  58. Kelishadi R, Hashemipour M, Adeli K, et al. Effect of zinc supplementation on markers of insulin resistance, oxidative stress, and inflammation among prepubescent children with metabolic syndrome. Metab Syndr Relat Disord. 2010 Dec;8(6):505-10.
  59. Singh RB, Niaz MA, Rastogi SS, Bajaj S, Gaoli Z, Shoumin Z. Current zinc intake and risk of diabetes and coronary artery disease and factors associated with insulin resistance in rural and urban populations of North India. J Am Coll Nutr. 1998 Dec;17(6):564-70.
  60. Cortese MM, Suschek CV, Wetzel W, Kroncke KD, Kolb-Bachofen V. Zinc protects endothelial cells from hydrogen peroxide via Nrf2-dependent stimulation of glutathione biosynthesis. Free Radic Biol Med. 2008 Jun 15;44(12):2002-12.
  61. Foster M, Samman S. Zinc and regulation of inflammatory cytokines: implications for cardiometabolic disease. Nutrients. 2012 Jul;4(7):676-94.
  62. Reiterer G, MacDonald R, Browning JD, et al. Zinc deficiency increases plasma lipids and atherosclerotic markers in LDL-receptor-deficient mice. J Nutr. 2005 Sep;135(9):2114-8.
  63. Shen H, Arzuaga X, Toborek M, Hennig B. Zinc nutritional status modulates expression of ahr-responsive p450 enzymes in vascular endothelial cells. Environ Toxicol Pharmacol. 2008 Mar;25(2):197-201.
  64. Shen H, Oesterling E, Stromberg A, Toborek M, MacDonald R, Hennig B. Zinc deficiency induces vascular pro-inflammatory parameters associated with NF-kappaB and PPAR signaling. J Am Coll Nutr. 2008 Oct;27(5):577-87.
  65. Wang J, Song Y, Elsherif L, et al. Cardiac metallothionein induction plays the major role in the prevention of diabetic cardiomyopathy by zinc supplementation. Circulation. 2006 Jan 31;113(4):544-54.
  66. Wang L, Zhou Z, Saari JT, Kang YJ. Alcohol-induced myocardial fibrosis in metallothionein-null mice: prevention by zinc supplementation. Am J Pathol. 2005 Aug;167(2):337-44.
  67. Ashworth A, Morris SS, Lira PI, Grantham-McGregor SM. Zinc supplementation, mental development and behaviour in low birth weight term infants in northeast Brazil. Eur J Clin Nutr. 1998 Mar;52(3):223-7.
  68. Brewer GJ. Copper excess, zinc deficiency, and cognition loss in Alzheimer’s disease. Biofactors. 2012 Mar-Apr;38(2):107-13.
  69. Cope EC, Morris DR, Scrimgeour AG, Levenson CW. Use of zinc as a treatment for traumatic brain injury in the rat: effects on cognitive and behavioral outcomes. Neurorehabil Neural Repair. 2012 Sep;26(7):907-13.
  70. Cope EC, Morris DR, Scrimgeour AG, VanLandingham JW, Levenson CW. Zinc supplementation provides behavioral resiliency in a rat model of traumatic brain injury. Physiol Behav. 2011 Oct 24;104(5):942-7.
  71. Corona C, Masciopinto F, Silvestri E, et al. Dietary zinc supplementation of 3xTg-AD mice increases BDNF levels and prevents cognitive deficits as well as mitochondrial dysfunction. Cell Death Dis. 2010;1:e91.
  72. Maylor EA, Simpson EE, Secker DL, et al. Effects of zinc supplementation on cognitive function in healthy middle-aged and older adults: the ZENITH study. Br J Nutr. 2006 Oct;96(4):752-60.
  73. Merialdi M, Caulfield LE, Zavaleta N, Figueroa A, DiPietro JA. Adding zinc to prenatal iron and folate tablets improves fetal neurobehavioral development. Am J Obstet Gynecol. 1999 Feb;180(2 Pt 1):483-90.
  74. Saini N, Schaffner W. Zinc supplement greatly improves the condition of parkin mutant Drosophila. Biol Chem. 2010 May;391(5):513-8.
  75. Summers BL, Henry CM, Rofe AM, Coyle P. Dietary zinc supplementation during pregnancy prevents spatial and object recognition memory impairments caused by early prenatal ethanol exposure. Behav Brain Res. 2008 Jan 25;186(2):230-8.
  76. Szewczyk B, Kubera M, Nowak G. The role of zinc in neurodegenerative inflammatory pathways in depression. Prog Neuropsychopharmacol Biol Psychiatry. 2011 Apr 29;35(3):693-701.
  77. Tupe RP, Chiplonkar SA. Zinc supplementation improved cognitive performance and taste acuity in Indian adolescent girls. J Am Coll Nutr. 2009 Aug;28(4):388-96.
  78. Evans JR, Lawrenson JG. Antioxidant vitamin and mineral supplements for slowing the progression of age-related macular degeneration. Cochrane Database Syst Rev. 2012;11:CD000254.
  79. Hyman L, Neborsky R. Risk factors for age-related macular degeneration: an update. Curr Opin Ophthalmol. 2002 Jun;13(3):171-5.
  80. Kokkinou D, Kasper HU, Bartz-Schmidt KU, Schraermeyer U. The pigmentation of human iris influences the uptake and storing of zinc. Pigment Cell Res. 2004 Oct;17(5):515-8.
  81. Moriarty-Craige SE, Ha KN, Sternberg P, Jr., et al. Effects of long-term zinc supplementation on plasma thiol metabolites and redox status in patients with age-related macular degeneration. Am J Ophthalmol. 2007 Feb;143(2):206-11.
  82. Siepmann M, Spank S, Kluge A, Schappach A, Kirch W. The pharmacokinetics of zinc from zinc gluconate: a comparison with zinc oxide in healthy men. Int J Clin Pharmacol Ther. 2005 Dec;43(12):562-5.
  83. Wood JP, Osborne NN. Zinc and energy requirements in induction of oxidative stress to retinal pigmented epithelial cells. Neurochem Res. 2003 Oct;28(10):1525-33.
  84. Agren MS. Studies on zinc in wound healing. Acta Derm Venereol Suppl (Stockh). 1990;154:1-36.
  85. Suwendi E, Iwaya H, Lee JS, Hara H, Ishizuka S. Zinc deficiency induces dysregulation of cytokine productions in an experimental colitis of rats. Biomed Res. 2012 Dec;33(6):329-36.
  86. Age-Related Eye Disease Study Research Group. A randomized, placebo-controlled, clinical trial of high-dose supplementation with vitamins C and E, beta carotene, and zinc for age-related macular degeneration and vision loss: AREDS report no. 8. Arch Ophthalmol. 2001 Oct;119(10):1417-36.
  87. Available at: http://lpi.oregonstate.edu/infocenter/minerals/zinc/. Accessed December 19, 2013.
  88. Uauy R, Olivares M, Gonzalez M. Essentiality of copper in humans. Am J Clin Nutr. 1998 May;67(5 Suppl):952S-9S.
¿Te resultó interesante este artículo?
Posted in: Enfermedades autoinmunes, Cáncer, Diabetes, Adelgazar, Zinc, Próstata, Piel, cabello, uñas

Artículos Relacionados