La mayoría de los hombres y mujeres en los Estados Unidos tienen deficiencia de magnesio, y esta deficiencia está fuertemente relacionada con la hipertensión. Múltiples estudios han demostrado que el magnesio puede ayudar a mantener una presión arterial saludable. Esto se ha demostrado a través de su capacidad para aumentar la producción de prostaglandina E1, que es un relajante vascular que también evita que se formen coágulos dentro de los vasos sanguíneos.